"El evento sucedió en mi cumpleaños. No recuerdo la fecha, sólo sé que era mi cumpleaños porque no había pastel ni regalos"
~ Jarod Kintz (1982 - ) en su libro "Este Libro No Tiene Título".
Ayer, como es costumbre para el mundo desde hace millones de años, completó una vuelta más alrededor del sol. Sucede la casualidad que ese día, hace más años de los que puedo recordar, fuí traído gritando y pataleando a este mundo.
Así es, no me morí en un año. Diría que es un logro insignificante pero sería una ofensa a mis amigos y conocidos difuntos que, por desgracia, no tuvieron el privilegio de envejecer.
Como es costumbre, fue el peor puñetero día de lo que va del año. Ignoro si es el hecho que la Brochetita no está aquí conmigo, o si es el hecho que como es el día en el que te permites la indulgencia de pensar más en tí eres consciente de las Tiznas Desgraciadas™ que te acomodas en el día laboral*, pero en general me he dado cuenta que el día de mi cumpleaños es estadísticamente el peor del año en curso**.
*Y la vida de un comisionado es, por definición, jodidamente horrible: trabajas todo el día porque la verdad no tienes nada más que hacer. Entonces fue un día puñeteramente abominable para esos estándares.
**Nunca había tomado tres llamadas al mismo tiempo. Afortunadamente mi buen amigo Smirnoff estaba esperándome al final del día con los brazos abiertos.
Mis cumpleaños anteriores habían sido malos - y sé que había prometido ya no renegar - pero no TAN malos. Éste llegó al nivel de hediondez de cuando vivía soltero. Me la pasé enfermo, por supuesto, solo, temiendo que se escapara la verdad porque los indios tienen la salvaje costumbre de patear al cumpleañero en las nalgas tantas veces como años haya cumplido***. Sin embargo, el hecho de haber estado tan lejos de la luz de mis días y del resto de mis amigos me hace llegar a una realización interesante: que la vida en general es una patada en las gónadas, todos los días, pero son las personas a nuestro alrededor las que hacen que valga la pena estar aquí. Supongo que debería tratar de ser una mejor persona o algo así.
***Tengo entendido que es sólo entre las personas universitarias, no deja de ser una barbarie, la verdad. Más porque yo soy de papel maché.
Muchas gracias a todos los que me felicitaron.
!Saludos!
Atte,
El Kushiage
~ El mejor regalo que puedo recibir es el amor que nos tenemos mi esposa y yo, no deja de sorprenderme lo mucho que mejora mi estado de ánimo cada vez que hablo con ella, incluso a distancia. Citando a Homero Addams: La amo no por la manera en la que baila con mis ángeles, sino por la manera en la que el sonido de su nombre silencia mis demonios. Ella es realmente lo mejor que me ha pasado.
