miércoles, 20 de abril de 2016

Cosas que Aprendí en Cancún

"El objeto de viajar no es poner los pies en una tierra extraña, sino es por fin poner los pies en nuestro propio país como si fuese una tierra extraña"
~ G.K. Chesterton (1874 - 1936)

Por diversas razones personales la semana pasada me tocó visitar el hermoso Cancún, de ahí la falta de entradas, sin embargo he venido de ahí con...

Cosas que Aprendí en Cancún

  • En el mar la vida es más sabrosa.
  • No puedes comprar en las tiendas "duty free" a menos que seas extranjero. Las excusas que me dieron es que se les vende a menor precio, aunque estoy completamente seguro que muchos de los artículos que se venden ahí están al precio que las podemos conseguir en tiendas locales. Lo que me lleva al siguiente punto...
  • El turista existe para ser exprimido. "¿De dónde nos visita?" no es una pregunta porque les interesa saber de dónde eres oriundo, es una manera de juzgar cuánto te van a cobrar por lo que ofrecen. Es en serio, vimos como nos cambiaban el precio de un artículo de estúpidamente ridículo a ridículo al saber que éramos nacionales. 
  • Hablando de exprimir, cuidado si rentas un carro. Los fines de semana (de viernes a domingo) los policías están especialmente atentos a cualquier transgresión o ilusión de una falta de tránsito para detenerte y sacarte dinero. Es en serio, el objetivo no es generar una multa de tránsito sino obtener dinero de sobornos ya que sus superiores se los exigen para continuar trabajando en la ciudad. Varios locales nos lo confirmaron: dependiendo del medio de transporte es la "cuota" que deben a sus supervisores, si no logran cumplirla son enviados a pueblos más pequeños. Manejen con precaución, mantengan su carril y no se pasen ni siquiera preventivas, es su palabra contra la de ellos y uno siempre las llevará de perder. 
  • Uber no existe. En Quintana Roo los gremios de taxistas - priístas por cierto - cerraron filas y negaron la entrada al servicio. Si gustas pedir taxi desde tu celular tienes dos opciones: "Quiero Taxi Cancún" el cual es absolutamente inservible y "Easy Taxi" el cual funciona pero cobra 45 pesos extras a la tarifa. Ah, y si vienes del aeropuerto tienes la opción de taxis "colectivos" (340 pesos) o "privados" (680 pesos). Porque vete a la mierda y dame dinero, por eso.
  • Las playas más bonitas de México están en Cancún. Definitivamente. El mar es sublime e incluso las playas públicas están más bonitas que las playas privadas de hoteles en otros destinos turísticos que he visitado. 
  • El "Todo Incluido" no lo es. Deberían renombrarlo a "La mayoría de las cosas incluídas menos lo bueno o lo que realmente se te antoja", pero supongo que no cabe en el espacio de las agencias de viajes.
  • Cancún está culinariamente hablando en pañales. Si gustan probar restaurantes gourmet visiten Puerto Vallarta. Porque...
  • Si visitan un hotel del que no son huéspedes serán tratados como leprosos. O parias. O parias leprosos. Hace años que no siento tanto desprecio como el que nos tuvo la concierge del Grand Oasis cuando tuvimos la idiota idea de ir a comer al White Box. Ciertamente el que está equivocado soy yo por ir a comer en su puñetero restaurante.
  • Sin embargo, debo ser justo y mencionar que el Grand Oasis Palm - ubicado en el km 4.5 de la zona hotelera - tiene un White Box que es posiblemente el mejor restaurante gourmet de Cancún. No, el Tempo no le llega ni a los talones.
  • Existe discriminación hacia los turistas nacionales, por desgracia. Lamento que mi dinero no valga veinte veces el de otros, malditos infelices, pero eso no les da derecho a tratarme con la punta del pie.
  • Las salas de juntas, sea en el paraíso o en la ciudad, son igualmente horribles.
  • Los residentes saben que sus playas son hermosas y hacen todo lo posible por mantenerlas en buen estado. Bien por ellos. Es inspirador ver gente recogiendo basura por el simple hecho de "mantener limpias nuestras playas".
Con todo y todo, mi mayor enseñanza es que genuinamente hay algo mágico sobre el mar. No lo sé, es algo indescriptible, algo primal, algo que te llama. Creo que ahora entiendo a todos esos "locos" que se olvidan de todo y se van a vivir al mar; Christopher Paolini tenía razón cuando escribió:

"El mar es la emoción encarnada. Ama, odia y llora. Desafía todos los intentos de capturarlo con palabras y rechaza todos los grilletes. No importa lo que digas sobre él, siempre habrá algo que no podrás expresar"

Cuánta razón.


!Saludos!
Atte,
El Kushiage
~ PD. Volaris puede seguir yéndose a la mierda. 

6 comentarios:

  1. No no no, volaris es la mejor aerolinea.

    El azar favorece a la mente preparada. Volaris tambien

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    1. Bien, supongo que si se utiliza como algún entrenamiento zen, claramente ver como el puñetero vuelo que iba dos horas después que el tuyo partir antes es el camino a la iluminación.

      Bah.

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  2. Acotación. La discriminación es hacia el turismo latinoamericano en general, no sólo a los mexicanos :S

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  3. para ser una brocheta atrapada en un refrigerador parece incomodarle mucho las molestias inherentes a los viajes ;P

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    1. No existen palabras en Élfico, Éntico o en las lenguas de los hombres que puedan expresar cuánto aborrezco viajar. No me malinterpretes, disfruto mucho los destinos, sin embargo el hecho de viajar es algo que desprecio con la intensidad de mil soles.

      Ciertamente viajar en avión es la manera que el destino tiene que nos parezcamos a la foto del pasaporte.

      !Saludos!
      Atte,
      El Kushiage

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  4. "Hueyatlan tetecuica auh tlatoa totonametl in manic"
    "El mar que late y habla con la voz del que perdura resplandeciendo"

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