martes, 16 de mayo de 2017

De Brochetas y Documentales Mal Reseñados

"La Naturaleza es la maestra del hombre. Desenvuelve sus tesoros a su búsqueda, abre sus ojos, ilumina su mente y purifica su corazón; es una influencia que respira de todas las vistas y sonidos de su existencia"
~ Alfred Billings Street (1811 - 1881)

No tiene nada que ver, pero durante los fines de semana le he dado un descanso a las noticias políticas para dedicarme a ver documentales en Netflix. El primero fue "Tiburón": una miniserie que nos presentan biólogos marinos que siguieron una variedad de especies de tiburón alrededor del mundo a lo largo de 350+ días.

El otro es el fenomenal "Planeta Tierra", producido por la BBC, donde docenas de camarógrafos, reporteros y biólogos se adentraron en toda la gama de biomas que hay en el planeta para documentar la difícil vida de los animales en el mundo salvaje.

Comento lo anterior porque, por alguna razón, los documentales tienen dos de cinco estrellas en la calificación de los usuarios. Dos. Pinches. Estrellas. Para estas obras maestras.

Verán, opino que hay tres tipos de personas que ven documentales:

  • Aquellas que dicen "!Bah, qué aburrido!"
  • Aquellas que exclaman "!Oh, qué interesante!"
  • Y aquellas que le gritan a la pantalla "¿PERO CÓMO FREGADOS FILMARON ESO?"


Yo estoy firmemente plantado en la tercera categoría. Y resulta ser que la respuesta a la pregunta es: con una infinita dedicación y paciencia. He aquí algunos hechos entretenidos sobre esta increíble serie:

  • Se filmó a lo largo de cinco años.
  • Costó 25 millones de dólares.
  • Los camarógrafos tardaron semanas e incluso meses filmando en una sola locación para unos cuantos segundos de película.
  • El equipo de filmación que trabajaba en las cuevas de Borneo (mi episodio favorito) vivió un mes entre cucarachas e insectos venenosos, dándose cuenta tres semanas después que iniciaron la filmación que esas gotitas que les caían encima cuando comían eran orines de murciélagos.
  • La filmación los llevó a la frontera entre Pakistán y Afganistán, cuando el mundo cazaba a los terroristas de Al Qaeda, para obtener el preciado momento en el que un leopardo de nieve caza un antílope. El cual fue el primer video en el mundo que nos mostraba cazando a este elusivo animal ¿mencioné que les tomó tres años filmarlo?
  • La icónica escena de aproximadamente minuto y medio de la mamá oso polar con sus ositos les tomó un mes de filmación. Sí, básicamente llegaban al puesto donde podían ver la madriguera, hacían campamento para esperar y, cuando no salía, regresaban a resguardo para hacerlo todo al día siguiente. POR UN MES.
  • Para filmar a los increíbles pingüinos en la Antártica, el equipo de filmación tuvo que arrastrar su instrumental por tres kilómetros con vendavales de hasta 160 km/h.
  • El hilarante ritual de apareamiento del ave del paraíso le tomó a un productor 300 horas de espera, con ocho o nueve horas de turno esperando a que apareciera uno.
  • El equipo que seguía a los gibones en la jungla sufrió entre 50 y 100 mordidas de sanguijuelas al día.
  • La toma de los perros salvajes cazando les llevó cerca de 50 horas de vuelo capturarla.


No sé ustedes, pero la existencia de este documental se me hace pinche increíble.

Ignoro si son las nuevas generaciones que ven pajaritos y dicen "vaya, qué aburrido" o por ahí anda una serie de troles fenomenales, pero ¿dos estrellas? ¿En serio?

!Saludos!
Atte,
El Kushiage
~ Ese documental es prueba fehaciente que la naturaleza es una ojete.

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