"Todos somos peregrinos en el mismo viaje, pero algunos peregrinos llevan mejores mapas carreteros"
~ Nelson DeMille (1943 - )
Nuestra ciudad es grande, muy grande. Mi profesión no es taxista y no la recorro mensualmente para saberme todos los recovecos. Con eso en mente, es normal que cuando me citen en algún lugar extraño y me digan "está cerca de la casa de la Cuca" y enfrente el parque con "El Monumento Estatal de las Palomas en Celo" no tenga ni pinche idea de dónde es*.
*Ni mucho menos de quién es Cuca ¿Quién carajos es Doña Cuca? Es más ¿quién es usted? ¿Por qué estoy hablando con usted? ¿Dónde estoy? ¿Por qué hay un monumento a las palomas calientes? ¿Por qué ese hombre trae una pistola aturdidora?
Así, me veo forzado a sacar mi confiable y desgastado librito con el mapa de la ciudad y limitarme a preguntar "¿entre qué y qué calle cruza?". Esto, según parece, es la peor ofensa que le puedo hacer a alguien, quizás por dos razones: la primera, pocos ponen suficiente atención al nombre de las calles y segunda, se siente heridos porque no quiero escuchar su explicación magisterial de cómo llegar al puñetero lugar usando callejones que enorgullecerían a la mafia local.
Le debo mi habilidad de hacer y leer mapas a mi padre y a los videojuegos**, y para mi sorpresa es algo que pocas personas se han molestado en refinar o siquiera en aprender. Cuando estoy perdido en una plaza y buscando un local siempre me acerco a un mapa, cuando hablo a algún lugar para ir a visitarlos siempre pregunto las calles aledañas, cuando en duda, ese pedazo de papel que me dice "usted está aquí" me baña de tranquilidad.
**Cuando eres perseguido por una horda de monstruos y sólo te quedan dos cohetes más te vale que sepas encontrar esas cajas de municiones que dejaste guardadas para algo así.
Lo prefiero a preguntar, y no porque odio el contacto humano, sino porque siento que al acercarme a alguien y preguntar "disculpe ¿dónde queda X cosa? ¿Podría decirme porque soy demasiado flojo para leer el mapa por favor?" estoy modificando un poquito la trayectoria de ese meteorito que viene a destruirnos por insensatos.
¿GPS? No gracias, no confiaría el servicio de red de Telcel para algo en tiempo real ni aunque mi vida dependiera de ello. Además, no quisiera acabar como esas historias que se leen de gente que, siguiendo las indicaciones de "Google Maps" o de sus GPSs terminan en el fondo de un río o saliéndose del borde de un desfiladero.
Supongo que la selección natural encuentra una manera de evitar la tecnología.
!Saludos!
Atte,
El Kushiage
~ Nelson DeMille (1943 - )
Nuestra ciudad es grande, muy grande. Mi profesión no es taxista y no la recorro mensualmente para saberme todos los recovecos. Con eso en mente, es normal que cuando me citen en algún lugar extraño y me digan "está cerca de la casa de la Cuca" y enfrente el parque con "El Monumento Estatal de las Palomas en Celo" no tenga ni pinche idea de dónde es*.
*Ni mucho menos de quién es Cuca ¿Quién carajos es Doña Cuca? Es más ¿quién es usted? ¿Por qué estoy hablando con usted? ¿Dónde estoy? ¿Por qué hay un monumento a las palomas calientes? ¿Por qué ese hombre trae una pistola aturdidora?
Así, me veo forzado a sacar mi confiable y desgastado librito con el mapa de la ciudad y limitarme a preguntar "¿entre qué y qué calle cruza?". Esto, según parece, es la peor ofensa que le puedo hacer a alguien, quizás por dos razones: la primera, pocos ponen suficiente atención al nombre de las calles y segunda, se siente heridos porque no quiero escuchar su explicación magisterial de cómo llegar al puñetero lugar usando callejones que enorgullecerían a la mafia local.
Le debo mi habilidad de hacer y leer mapas a mi padre y a los videojuegos**, y para mi sorpresa es algo que pocas personas se han molestado en refinar o siquiera en aprender. Cuando estoy perdido en una plaza y buscando un local siempre me acerco a un mapa, cuando hablo a algún lugar para ir a visitarlos siempre pregunto las calles aledañas, cuando en duda, ese pedazo de papel que me dice "usted está aquí" me baña de tranquilidad.
**Cuando eres perseguido por una horda de monstruos y sólo te quedan dos cohetes más te vale que sepas encontrar esas cajas de municiones que dejaste guardadas para algo así.
Lo prefiero a preguntar, y no porque odio el contacto humano, sino porque siento que al acercarme a alguien y preguntar "disculpe ¿dónde queda X cosa? ¿Podría decirme porque soy demasiado flojo para leer el mapa por favor?" estoy modificando un poquito la trayectoria de ese meteorito que viene a destruirnos por insensatos.
¿GPS? No gracias, no confiaría el servicio de red de Telcel para algo en tiempo real ni aunque mi vida dependiera de ello. Además, no quisiera acabar como esas historias que se leen de gente que, siguiendo las indicaciones de "Google Maps" o de sus GPSs terminan en el fondo de un río o saliéndose del borde de un desfiladero.
Supongo que la selección natural encuentra una manera de evitar la tecnología.
!Saludos!
Atte,
El Kushiage
De otra forma; la selección natural actua en la correcta penetración de la tecnología en nuestra especie.
ResponderEliminarYo nunca he entendido eso de "subir" y "bajar" cuando se dan indicaciones, sólo sé que es dependiente de la dirección y sentido del desplazamiento. Es más objetivo emplear los puntos cardinales.
Oh, ciertamente mi estimado Blacer. Recuerdo que alguna vez me explicaron el por qué las callen "subían" y "bajaban", pero no recuerdo por qué.
ResponderEliminarMeh, costumbre es ley y todo eso, supongo.