lunes, 10 de diciembre de 2012

Peras de Granito, Año 16

"¿Tienes enemigos? Bien. Eso significa que has defendido algo, en algún momento de tu vida."
~ Winston Churchill (1874 - 1965)

Misiva de Urist McKushiague, Supervisor del Hogar en las Montañas "Peras de Granito", hacia el Duque Sir. Sturd Cavachong Von Portajust I, Todólogo del Portal Justo, año 267.

05 de Granito, primavera

Reporte del Año 16.


Sturd, ha pasado un año y no nos hemos podido deshacer de los malditos cadáveres.

Sin embargo, gracias a la política autosustentable-porque-todo-pinche-mundo-nos-sitia que implementamos una década atrás, se han convertido en un valioso método de defensa contra emboscadas goblin, kobold y MegaBestias.

Verás, durante la primavera los vigías observaron cómo los muertos vivientes avasallaban un trío de emboscadas kobols. En el verano, apareció un bestial hombre-civeta "Nasod Otungshurrat", una abominación de la naturaleza. Era un gigantesco humanoide con el rostro de un gato civeta y terribles garras. Llegó, aulló su nombre y anunció que era hora que "temiéramos a las criaturas de la noche", se enfrentó a un zombi que le quizo morder el cuello mientras daba su discurso, vio los cien zombis que se abalanzaban hacia él, dio media vuelta y se fue corriendo hasta perderse en el horizonte.

Bienvenido a Peras de Granito, imbécil, donde tenemos un puñetero sitio de muertos vivientes como primera línea de defensa.

En el otoño, arribó el Minotauro Almosh Nokzamzatam Ekzongshedim; terrible bestia que se encontró una emboscada de martilladores goblin; despedazó a tres hasta que fue puesto de rodillas y matado de un golpe en el cráneo, luego los goblins sirvieron de desayuno a la horda zombi. Es lo bueno de éstos bichejos, se alimentan solos.

Algunos de ellos ya hasta han sido bautizados por la milicia de la fortaleza.

Creo que ya sé por qué Peras de Granito sigue en pie, Sturd: tenemos demasiados enemigos y la suerte que todos se odian entre sí tanto como a nosotros, en el mejor de los casos esperamos a que se despedacen entre ellos y lidiamos con los supervivientes. Nuestro lema no oficial es "Si deseas destruirnos, tendrás que tomar turno". Me reiría si no estuviera tan pinche asustado de salir.

Con la esperanza de mantener distraída a la población, hemos creado una Bóveda de Artefactos abierta al público donde almacenamos los hermosos trabajos que ha producido nuestra especie: una espada de hueso de goblin, una ballesta de maple, una lanza de cobre, un guantelete de cobre, una joya perfecta, un trono de piedra, una cama de gemas, dos porta-armaduras, una estatua de plata, cetros/consoladores, anillos, aretes y por supuesto la taza hecha de plata llamada "La Fortaleza de la Dominación", la cual es tan puñeteramente popular que dos de cada tres artefactos tienen una imagen de la dichosa taza en ellos.

Ha mejorado mucho la moral, no les importa que hayas perdido a su perro de compañía de quince años siempre y cuando hayan visto la jodida taza legendaria.

Hablando de joder, dado que estamos preparados para el apocalipsis zombi que ya llegó, en la primavera decidimos levantar las medidas de control poblacional en Peras de Granito. Digo, lo peor que puede pasar es que nos convirtamos en una colonia de menonitas si no vemos más migrantes. Para el invierno ya teníamos siete chilpayates rompiéndonos los tímpanos con sus enfadosos berridos. Vida adentro de Peras de Granito, muerte afuera. Pura puñetera poesía.

Por cierto, las labores de excavación encontraron un inmenso mar subterráneo arriba del "primer" nivel de cavernas; resulta ser que tuvimos la suerte de cavar las escaleras por una estalagmita que atravesaba el primer nivel de cavernas subterráneas y por eso nunca nos dimos cuenta, quién lo hubiera dicho.
 
En fin, hicimos un puente para cerrar la entrada y estamos decidiendo qué hacer con este descubrimiento, supongo que podríamos poner a trabajar a los diecisiete pescadores que tenemos oxidándose.

Ya casi terminamos con la trampa de picos. Espero que cuando por fin limpiemos a los muertos vivientes podamos instalar la puerta, porque estoy muy decepcionado de "La Perfección del Enclaustramiento". Han entrenado muy duro, es cierto, y uno de ellos ya es considerado un maestro del martillo de guerra; el problema es que los muy imbéciles son ballesteros.

Los mamoncetes son expertos desperdiciando dardos contra los blancos de práctica, y tengo que admitir que se han hecho muy buenos en ello, pero ignoro por qué son incapaces de alfiletear goblins desde las fortificaciones cuando son postrados en las torres de seguridad.

Son una vergüenza para nuestra milicia.

Atte,
Urist McKushiage

PD. Si envían migrantes, por favor, !por las barbas ardientes de Armok, envíen chupapiedras que sean comerciantes! !Hay doscientos cinco mamoncetes aquí y ninguno sabemos apreciar el valor de las cosas! !Los siguientes mercaderes que vengan nos van a dejar sin camisa!

!Saludos!
Atte,
El Kushiage

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