"Mi idea de la navidad, sea moderna o antiquada, es muy simple: Ama a los otros. Pensandolo bien ¿Por qué esperamos hasta navidad para hacer eso?"
~ Bob Hope (1903 - 2003)
Hace mucho mucho tiempo, 95 años para ser exactos, el 24 de Diciembre de 1914 durante la Primera Guerra Mundial, en una región atrincherada en Ypres en Bélgica, los soldados alemanes comenzaron a decorar sus trincheras desde las que peleaban con soldados británicos; después, continuaron con la celebración cantando villancicos, principalmente "Stille Nacht" (Noche de Paz). Las tropas británicas, desde el otro lado del campo atrincherado contestaron cantando villancicos en inglés.
Por un tiempo, ambos bandos se gritaron felicitaciones navideñas desde sus trincheras y de pronto lo inesperado sucedió: hubieron llamados para cruzar la "Tierra de Nadie" (que es el centro entre los dos bandos de trincheras), y cosa increíble, hubieron hombres que los contestaron.
Los soldados británicos y alemanes se encontraron en medio de sus territorios donde se intercambiaron pequeños regalos como whisky, mermelada, cigarros, chocolates y otras pequeñas chucherías. Los soldados intercambiaron regalos, a veces las direcciones donde vivían y bebieron juntos. La artillería cayó en silencio esa noche.
La tregua permitió un respiro para que ambos bandos recogieran a los caídos y los regresaran detrás de sus respectivas trincheras para enterrarlos. Se realizaron entierros individuales, apropiados, y los soldados de ambos bandos lloraron a los muertos y ofrecieron sus respetos.
La tregua se extendió a otras áreas de las líneas de trincheras, donde hay muchas historias de partidos de futbol soccer entre las fuerzas opuestas.
En muchos sectores, la tregua duró hasta la noche de navidad, pero en otras áreas duró hasta el fin del año.
Esta historia no es ficticia, no es fantasía y no es una imaginación del cine, esto realmente sucedió. Esto es testimonio de la nobleza humana y de la belleza del espíritu humano, del espíritu de la Navidad y de todo de lo que somos capaces si sólamente dejáramos de ser ojetes con las otras personas que nos rodean. Estoy consciente que sólo soy una pequeña brocheta, encerrada en un refrigerador, pero les pido que hagan una buena acción esta navidad; hay tanto odio en el mundo que una sola acción si hace la diferencia, se los aseguro.
Un abrazo a todos.
!Felicidad en el mundo y paz a los hombres de buena voluntad! !Feliz Navidad a todos!
Atte,
El Kushiage
~ Bob Hope (1903 - 2003)
Hace mucho mucho tiempo, 95 años para ser exactos, el 24 de Diciembre de 1914 durante la Primera Guerra Mundial, en una región atrincherada en Ypres en Bélgica, los soldados alemanes comenzaron a decorar sus trincheras desde las que peleaban con soldados británicos; después, continuaron con la celebración cantando villancicos, principalmente "Stille Nacht" (Noche de Paz). Las tropas británicas, desde el otro lado del campo atrincherado contestaron cantando villancicos en inglés.
Por un tiempo, ambos bandos se gritaron felicitaciones navideñas desde sus trincheras y de pronto lo inesperado sucedió: hubieron llamados para cruzar la "Tierra de Nadie" (que es el centro entre los dos bandos de trincheras), y cosa increíble, hubieron hombres que los contestaron.
Los soldados británicos y alemanes se encontraron en medio de sus territorios donde se intercambiaron pequeños regalos como whisky, mermelada, cigarros, chocolates y otras pequeñas chucherías. Los soldados intercambiaron regalos, a veces las direcciones donde vivían y bebieron juntos. La artillería cayó en silencio esa noche.
La tregua permitió un respiro para que ambos bandos recogieran a los caídos y los regresaran detrás de sus respectivas trincheras para enterrarlos. Se realizaron entierros individuales, apropiados, y los soldados de ambos bandos lloraron a los muertos y ofrecieron sus respetos.
La tregua se extendió a otras áreas de las líneas de trincheras, donde hay muchas historias de partidos de futbol soccer entre las fuerzas opuestas.
En muchos sectores, la tregua duró hasta la noche de navidad, pero en otras áreas duró hasta el fin del año.
Esta historia no es ficticia, no es fantasía y no es una imaginación del cine, esto realmente sucedió. Esto es testimonio de la nobleza humana y de la belleza del espíritu humano, del espíritu de la Navidad y de todo de lo que somos capaces si sólamente dejáramos de ser ojetes con las otras personas que nos rodean. Estoy consciente que sólo soy una pequeña brocheta, encerrada en un refrigerador, pero les pido que hagan una buena acción esta navidad; hay tanto odio en el mundo que una sola acción si hace la diferencia, se los aseguro.
Un abrazo a todos.
!Felicidad en el mundo y paz a los hombres de buena voluntad! !Feliz Navidad a todos!
Atte,
El Kushiage
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